La mujer donante es María Elina Silvestri, quien le explicó a Ecos Diarios de Necochea que se había anotado en el registro de donantes hace ocho años y que hace unos meses recibió un llamado del Incucai. En esa comunicación le confirmaban que había salido como potencial donante de una paciente en Francia. “Me inscribí en el registro pensando que tal vez esa llamada no iba a llegar porque es difícil que eso ocurra. Sin embargo, llegó hace tres meses”.

A partir de esa llamada, se avanzó con los controles médicos, diferentes consentimientos que la donante tuvo que ir dando, hasta que llegó el momento de la donación. Silvestri destacó del Incucai “su calidez, su profesionalismo y amor que tuvieron desde el minuto cero”. Y remarcó la importancia de que cada vez haya más donantes de medula ósea: “Esta persona no tenía ningún compatible en su familia, se buscó en Francia y tampoco había, así llegaron hasta Necochea. Solo dos personas en el mundo estábamos habilitadas”, explicó.

Cómo donar médula ósea 

Se pueden inscribir como donantes todas las personas de entre 18 y 40 años que gocen de buena salud, pesen más de 50 kilos y no tengan antecedentes de enfermedades cardíacas, hepáticas o infectocontagiosas.

FUENTE: Entrelineas.