“No estábamos acostumbrados a perder el clásico y eso podía habernos afectado anímicamente, pero desde el martes había visto a un equipo comprometido”, resumió Inzaghi, al afirmar que “esta victoria es del plantel, del cuerpo técnico, del club y de estos fanáticos increíbles a los que escuchamos alentar desde el vestuario”.

“Esta cercanía, sobre todo después de una derrota en el Derby, es extraordinaria”, agregó el entrenador de Inter, que ahora podrá preparar con más tranquilidad el duelo de este martes en Milán frente a Estrella Roja por la segunda fecha de una Champions League con nuevo formato en la que debutó sin goles en campo del Manchester City.

“Este triunfo es fruto del compromiso de cada uno de los jugadores porque incluso los cinco que ingresaron con el partido en marcha estuvieron increíbles, empezando por Joaquín Correa”, destacó Inzaghi al aludir al delantero argentino que reemplazó a su compatriota Martínez, y también a quienes no jugaron, pero “alentaron desde el banco a sus compañeros hasta el final”.

“Ganar en campo de Udinese no podía darse por descontado como muchos suponían”, completó el técnico de un Inter que empezó a ganar casi desde el vestuario como suele decirse y como reconoció su colega Runjaic al afirmar: “No nos pueden marcar un gol en la primera llegada, otro en el último segundo del primer tiempo y uno en el inicio del segundo”.

“Inter mereció ganar y aunque regalamos los tres goles, nos mantuvimos en partido ante el mejor equipo de Italia y uno de los cinco mejores de Europa”, destacó sin embargo el alemán, según el cual Udinese debe “aprender de estos errores” antes de afirmar: “Prefiero perder jugándomela hasta el final que afrontar un partido así con temor. Estamos en un proceso de crecimiento”.