Fue la noche especial desde todos los aspectos. Desde la despedida del Chase Stadium en partido de la etapa regular de la MLS a la fiesta de los ex culés: Leo, Jordi y Suárez. Messi fue desafectado a último momento de la Selección Argentina, dijo presente ante Atlanta United y la rompió, con dos golazos, una asistencia y su magia intacta. Alba jugó un partido sentimental tras el anuncio de su retiro a inicios de esta semana. Y Suárez completó la fiesta. Los tres marcaron golazos en la victoria por 4-0 ante el equipo de Georgia, aseguraron el tercer puesto del Este -jugará, al menos, primera fase de Playoffs de local- y sueñan con terminar segundos en el Decision Day. Como si fuera poco, la noche finalizó redonda con un emotivo homenaje a Alba.

El 10 arrancó enchufadísimo, pero se encontró una y otra vez con una barrera bajo los tres palos llamada Jayden Hibbert -imposible no recordar la serie de Playoffs en la que Brad Guzan, hoy en el banco, amargó a Las Garzas-. Pero después de unos intentos -mano a mano, tiro libre, larga distancia-, Leo la agarró de afuera, en la puerta del área grande, tras una buena asistencia de Baltasar Rodríguez, abrió su pie zurdo, la clavó pegada al palo para poner el 1-0 y quedar como goleador en soledad de MLS. Suárez pudo haber estirado la ventaja, pero nuevamente el joven portero estadounidense y el travesaño lo evitaron.